Demon Wan’s - Capítulo 103 Parte 1

Capítulo 103 Parte 1 - No quiero responder, entonces te besaré (1)

Traducción: Koh
Edición/Corrección: Crys


Las palabras de Murong Qi Qi sorprendieron a Murong Qing Lian, haciendo que sus labios rojos temblaran ligeramente.

"¿Qué? ¿Qué estás diciendo? No entiendo…"

"¿No lo entiendes o lo estás negando?"

Murong Qi Qi se burló y la intención asesina en sus bellos ojos se hizo más fuerte.

"¿Tengo que agradecerte por tener piedad? Afortunadamente, solo usaste 2 clavos; Si hubieras puesto 20, ¿No habría muerto en el acto? No... no habrías usado tantos; de lo contrario, habría expuesto tu corazón vicioso. Por lo cual, solo pusiste 2. ¡Uno a la izquierda y el otro a la derecha, para que apuñalaran mis huesos!”

Solo de pensar en esas cosas que el dueño original de este cuerpo había experimentado, hizo que la mirada de Murong Qi Qi al observar a Murong Qing Lian se pusiera más fría y fija hacia su objetivo. ¡Antes, esta lastimosa persona murió a manos de estas viciosas personas! Ahora, ella había viajado por el tiempo aquí. Si no hubiera sido porque ella se había encontrado con su padrino y el maestro y recibido tratamiento a tiempo, este par de piernas se habrían considerado incurables por el resto de su vida.

"No, no, no fui yo..."

Murong Qing Lian negó con la cabeza y se mordió los labios. Murong Qi Qi realmente había descubierto que este asunto había sido hecho por ella. ¡¿Cómo era posible?!

Ella solo quería enseñarle una lección a Murong Qi Qi. Era por eso que dejó que los sirvientes pusieran clavos en las grietas del palo de madera. Con la 1º paliza, esos clavos entrarían en sus huesos, ya que ella había escuchado que, debido a esto, las piernas de algunas personas se volvieron inservibles. No esperaba que no solo Murong Qi Qi fuera sanada y salvada, ¡Sino también aprendiera artes marciales!

Cuando Murong Qi Qi regresó, solo había pensado que había sido muy afortunada y que esos clavos solo habían entrado en su piel, pero no le habían lastimado los huesos. Ahora, después de escuchar las palabras de Murong Qi Qi, Murong Qing Lian finalmente entendió que esos clavos realmente se le habían incrustado. Sin embargo, incluso con eso, ¡Ella fue capaz de sobrevivir! ¡Verdaderamente increíble!

"Oh…"

Al ver que Murong Qing Lian estaba a punto de morir, pero aún actuaba con los labios apretados, la frialdad en los ojos de Murong Qi Qi se derritió de inmediato y se volvió muy dulce y suave.

"Si fuiste tu o no, ¡Aún te hare responsable!"

Sin esperar a que Murong Qing Lian meditara sobre la trama detrás de la dulce sonrisa de Murong Qi Qi, la mano de Murong Qi Qi se tensó y quitó la muselina roja, que actualmente estaba envuelta en Murong Qing Lian.

"Ah..."

Murong Qing Lian gritó de dolor. La muselina roja había rozado su piel, dejándole inmediatamente una capa de cortes delgados y angostos y la sangre al instante manchó su vestido de color claro.

¡Eso no estaba bien! Jia Lan se sorprendió, nunca pensó que Murong Qi Qi podría herir a este punto a personas usando solo una muselina roja.

"Señor, este es el torneo de los 4 países. ¡No podemos intervenir!”

Al ver que Jia Lan quería salvar a Murong Qing Lian, Jin Yu rápidamente lo agarró del brazo.

"Sin mencionar cuán débil es ella. ¡¿Cómo podría ser ella la que el señor Misha está buscando?!"

Jia Lan sabía que Jin Yu tenía razón. ¿Cómo podría la persona que rompió la ilusión del 6º piso ser tan 'decepcionante'?

Justo, antes de venir, Misha le dejó claro, ¡Que era mejor reconocer a 1000 personas mal que soltar 1! Entonces, a la final, si esta Murong Qing Lian era realmente al que Misha quería encontrar, solo podían esperar hasta que Misha lo confirmara personalmente. Y su tarea era asegurar que Murong Qing Lian todavía estuviera viva hasta que llegara Misha.

Justo cuando la muselina roja de Murong Qi Qi se envolvió una vez más alrededor del cuerpo de Murong Qing Lian, una figura en azul apareció frente a Murong Qi Qi. Una luz plateada brilló y el fino cuchillo en la mano de Jia Lan cortó la muselina roja en 2.
"Señorita, la persona ya admitió la derrota, ¿Por qué debería continuar y quitarle la vida? ¡Donde es posible dejar ir a la gente, uno debe perdonarlos*!”
*(E: que hay que perdonas a las personas, aunque hayan cometido errores)

Con una sonrisa que nunca cambio, la expresión de Jia Lan fue gentil y tranquila. La repentina aparición de Jia Lan hizo que Murong Qi Qi se sorprendiera por un momento y también dejó que Murong Qing Lian viera la esperanza.

"Salvar una vida es más meritorio que construir una pagoda de 7 pisos. Además, la señorita y ella son familia. ¿Por qué la necesidad de masacrarse?"

Murong Qing Lian dejó de jadear en el suelo. Esas pequeñas heridas dolian mucho. Al ver que alguien había venido a salvarla, Murong Qing Lian rápidamente se arrastró y se agarró a la pierna de Jia Lan, al igual que cuando alguien se cayó al agua y vio un salvavidas. Ella se aferró con fuerza a la ropa de Jia Lan.

"Te lo ruego, sálvame. Ella me matara. ¡Te lo ruego! ¡Sálvame!"

La fuerza que venía de sus pies hizo que Jia Lan frunciera ligeramente el ceño.

Miró y vio que las ropas azules estaban manchadas de sangre y la expresión de Jia Lan se puso más fea. Aunque todavía mantenía su sonrisa, pero el cuchillo en su mano cortó la pieza que Murong Qing Lian estaba agarrando en su ropa. Se movió hacia un lado, recuperó su pierna y no permitió que Murong Qing Lian se acercara a él otra vez.

No le gustaba que las mujeres lo tocaran. Además, el cuerpo de Murong Qing Lian estaba manchado de sangre; muy sucia. Temiendo que Murong Qing Lian volviera a envolverse con él, Jia Lan simplemente se quedó en un lugar fuera del alcance de ella para evitar que se acercara a él.

"¿Por qué no la sueltas?! ¡Hazlo como si me estuvieras dando la cara!”

Jia Lan sonrió a Murong Qi Qi.

"¿Tú?"

Murong Qi Qi ya estaba muy descontenta por haber sido molestada. Ahora, Jia Lan había tirado un montón de sandeces apelando por la razón, que causo que el estado de ánimo de Murong Qi Qi empeorara. Ella levantó una ceja y reveló una sonrisa encantadora.

"¿Quién eres tú? ¿Qué cara tienes para estar calificado para que te dé la cara?"

La voz de Murong Qi Qi estaba llena de insatisfacción. Sus palabras sarcásticas sorprendieron a Jia Lan por un momento. Por 1º vez, una sonrisa no apareció en su rostro.

Que Murong Qi Qi se negaría estaba dentro de las expectativas de Jia Lan. A pesar de que no había escuchado la conversación entre Murong Qi Qi y Murong Qing Lian, aun por la información que había reunido sabia que en el pasado, en la residencia Murong, Murong Qing Lian no permitió que esta 3º hermana tuviera una buena vida. Así que, los rencores entre ellas ya estaban allí y no era como si ella fuera a dejarlo solo porque él lo dijo.

Sin embargo, ya había aceptado la orden de Misha antes de venir aquí. Independientemente de si Murong Qing Lian era la persona que Misha deseaba encontrar, siempre que existiera esta posibilidad, entonces debía hacer lo que le había prometido a Misha. ¡Hoy, tomaría a esta Murong Qing Lian a su cuidado!

"Entonces, ¿Qué es lo que la señorita desea para que la deje ir?"

"Pregúntale a mi muselina roja si está dispuesta a darte la cara."

Mientras Murong Qi Qi estaba hablando, la muselina roja en su mano fue directamente a la cara de Jia Lan. Sin embargo, todavía no había tocado a Jia Lan, cuando fue agarrado por él.

"Señorita, mientras lo tenga, la señorita puede pedirlo, incluso te lo ofrecería con ambas manos. ¡Solo le pido a la señorita que le perdone hoy la vida!"

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