jueves, 11 de junio de 2020

Demon Wan’s - Capítulo 86 Parte 3

Capítulo 86 Parte 3 - Un duelo de vida y muerte (2)


Traducción: Koh
Edición: Flor 2
Corrección: Crys


Originalmente, Murong Qi Qi quería jugar un poco más con Gu Li y agotarla, para entonces quitarle la vida. Pero Murong Qi Qi no pensó que Gu Li atraería a Feng Cang dentro de esto, lo cual hizo a Murong Qi Qi muy infeliz. ¡Su hombre solo puede ser suyo, de Murong Qi Qi! La otra parte no solo quería a su hombre, sino que también quería tomar su posición. Esto era algo que Murong Qi Qi no podía tolerar.

Gu Li sin saber que había cruzado la línea con Murong Qi Qi. Al ver a Murong Qi Qi acercándose a ella, también se preparó para luchar. Tenía la intención de derribar la cabeza de Murong Qi Qi. Sin embargo, no esperaba que Murong Qi Qi saltaría y la muselina roja en su mano se moviera, pareciendo como la novena hada bajando a la tierra frente a ella.

"¡Gu Li, esquiva!"

Solo cuando la voz de Long Duo se extendió, Gu Li despertó de la sorpresa, pero era demasiado tarde para esquivarlo, asi que solo podía caer de costado en el suelo y rodar a un lugar seguro.

*Golpear*

La muselina roja golpeo el suelo. Los copos de nieve salpicaron, revelando la losa de pavimentación negra original.

*Romper*

La losa se agrietó.

*Agrietar*

La grieta se hizo más grande y toda la piedra se convirtió en polvo.

*Choque* Todos miraron tontamente a esa mujer distante. ¿Solo una muselina roja pudo hacer estallar una fuerza tan poderosa? Si caía sobre el cuerpo de una persona...... todos no podían evitar mirar compasivamente a Gu Li. Afortunadamente, esta mujer esquivó rápidamente, de lo contrario, ella habría sido gravemente herida.

La ruptura de la losa también dejó a Gu Li temblando. ¿Qué clase de fuerza horrible era esa? Ella claramente era una basura sin ninguna energía interna. ¿Cómo es que tenia una fuerza tan poderosa para aplastar la losa del camino? La idea de que si no hubiera sido por el recordatorio de Long Duo, todos sus huesos habrían sido aplastados, todo el cuerpo de Gu Li se estremeció. Su vigilancia también aumentó al más alto nivel.

"¡Ah!"

Murong Qi Qi no le dio a Gu Li la oportunidad de respirar. Esa muselina roja parecido de repente cobrar vida en sus manos. Bailaba en el cielo. Y el cuerpo femenino de Murong Qi Qi estaba envuelto en la muselina roja. Sobre la blanca nieve, una belleza en rojo bailaba con la muselina roja. Bailando como si viniera de una hermosa pintura frente a todos.

Muy hermoso...... Li Yun Qing estaba aturdido y no pudo evitar sacar su flauta de jade para tocar la canción ‘Tres Carriles de Flor de Ciruelo’.

Murong Qi Qi siguió la música y bailó con el ritmo. En el cielo, la larga muselina roja creaba una bella imagen. Al momento siguiente, la muselina roja cayó junto a Gu Li. Al igual que la vez anterior, la losa de piedra se rompió y se convirtió en polvo. La escena dulce y hermosa había desaparecido y revelaba una fuerte aura asesina.

Gu Li lo esquivó en un estado lamentable sobre la nieve. La muselina roja en Murong Qi Qi parecía tener alas y voló repetidas veces hacia ella. Sin importar dónde callera, la muselina roja la perseguiría inmediatamente. No golpeando cerca donde estuviese, simplemente golpeaba el lugar exacto de donde estuviese parada, por lo que no podía evitar ‘escapar’.

De repente comenzó a nevar. Este pequeño blanco, hizo que la mujer bailara en la nieve más animada. Su rostro tenía una sonrisa amable y bailaba una danza movida sobre la nieve, pero la fuerza en su mano no disminuyó un poco. Ella presionó más y más fuerte, por lo que era imposible que Gu Li escapase por mucho tiempo.

La gente al ver tal escena, olvidó que este era un duelo de vida y muerte y todos estaban inmersos en el maravilloso baile de Murong Qi Qi. La nieve blanca, el alma roja y esa esencia del alma roja era esa mujer bailadora.

Parecía un hada que cayó en el mundo de los mortales. Debido a la codicia por el bien terrenal, ella olvidó regresar al cielo. Ella bailó y usó esa pieza de muselina roja para contarle su afecto por el mundo. ¡Qué mujer tan maravillosa! En el corazón de todos se levantó tal pensamiento. Todos miraron silenciosamente a Murong Qi Qi y no se atrevieron a hacer un sonido, como si se atreviesen hacer algún sonido, alertarían a esa hada de su presencia.

La única persona que sentía amargura era Gu Li. Los ojos de la gente eran suaves y puros y el hada que era ante sus ojos, para Gu Li era como un demonio. Esta mujer no tenía intención de dejarle si quiera un minuto de descanso a su vida. En todas partes, donde estuvo parada, había sido golpeada por la muselina roja en la mano de Murong Qi Qi. Todas esas losas se habían convertido en pedazos. ¿Cuán brutal era esa fuerza? ¡Qué terrorífico!

Para poder operar una muselina tan suave y usarla para estallar esa fuerza, ¿Esta mujer era realmente la basura que no sabía artes marciales de los rumores?

En este momento, el sonido de la flauta de Li Yun Qing se hizo más alta. Y la muselina roja en la mano de Murong Qi Qi de repente exudaba una feroz aura asesina.

¡Esto era malo! Y Gu Li se sorprendió por ello.


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