Capítulo 98 Parte 4 - Primo hermano, eres una bestia (2)
Traducción: Koh
Edición: Flor 2
Corrección: Crys
"¡No hay necesidad de que me cedas los 3 primeros golpes!"
Murong Qing Lian se burló.
"Si la hermana mayor no me ruega que ceda los golpes, entonces estaré satisfecha. ¡¿Cómo dejaría que la hermana mayor me ceda los golpes a mí?! "
"Jeje, no está mal. ¡Tienes columna vertebral!"
Murong Qi Qi esbozo una sonrisa elegante sin la coquetería de una mujer, pero en cambio, tenía un aura heroica. Y el elegante gesto entre sus cejas, cayó directamente sobre Longze Jing Tian y Li Yun Qing, quienes estaban detrás de Murong Qing Lian, deslumbrándolos.
"¡Entonces hablemos con los puños en el torneo!"
"¡Es exactamente lo que quiero!"
Incluso otros podrían sentir alrededor, el trueno y el rayo entre las 2 hijas de la familia Murong. Aunque Wanyan Bao Zhu estaba muy lejos y no pudo oír nada de lo que habían dicho, pudo ver que las 2 se estaban enfrentando. ¡Muy bien! Era mejor dejarlas ser como perros y gatos. ¡Porque a la final la única beneficiada seria ella sin hacer nada!
Una era Murong Qi Qi, y la otra Murong Qing Lian; estas 2 personas eran como las espinas en su corazón. Si ella pudiera deshacerse de estas 2 espinas a través de este torneo, ¿No saldrían todos ganando? Al pensar que, en las próximas finales, estas 2 personas estarían terminadas o ambas heridas, Wanyan Bao Zhu se sintió feliz desde el fondo de su corazón. Parecía que era una decisión correcta el venir a ver el torneo de hoy.
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Si ganaban 3 duelos de 4 automáticamente significaba pasar la ronda, pero si ganabas 2 y perdías 2, entonces necesitabas seleccionar un competidor para competir una vez más. Todos sabían las reglas muy bien. Ahora, solo estaban esperando ver el proceso y los resultados.
La primera competencia fue Su Mei contra Li Yun Qing.
Después de nevar por unos días, hoy era un día raro porque estaba completamente despejado. Un sol anaranjado colgaba perezosamente en el horizonte. Sonriendo, miró a la tierra. Debido a que el sol expuso su cara, la nieve comenzó a derretirse, pero aun así la temperatura era muy baja, razón por la cual la cara de Su Mei estaba roja por el aire frío, como una Azalea en flor.
"¡Tu puedes, Pequeña Mei! ¡Estoy detrás de ti apoyándote! ¡Eres la mejor!"
La competencia aún no había comenzado, pero Wanyan Kang había hecho una trompeta de su mano y comenzado a gritar, haciendo que Su Mei se sintiera avergonzado.
"¡Golpéalos! ¡Pequeña Mei es la mejor! ¡Pequeña Mei debe ganar! ¡Destrózalos!"
Los gritos de Wanyan Kang reverberaron en el lugar, ya que era semicircular el sonido hacía eco aquí y por allá. Una palabra dicha por él, parecía como el grito de una muchedumbre, haciendo que Su Mei perdiera la paciencia.
"¡Suficiente! ¡Cállate!"
Finalmente, Su Mei se enojó y miró a Wanyan Kang, deseando poder sellar su boca.
"Si me haces bajar de este ring por seguir hacer un ruido más, te coseré la boca."
La voz de Su Mei sonó muy dura, sumado con la ayuda de la forma semicircular del lugar, la hacía parecer cada vez más ‘agresiva’.
"Woo ... la pequeña Mei es tan feroz conmigo ..."
Que le gritara frente a tanta gente Su Mei, hizo que Wanyan Kang inmediatamente se pusiera en cuclillas en el suelo con una cara lagrimeante.
"¡Pequeña Mei es tan feroz! ¡Muy aterradora!"
Las acciones de estos 2 enemigos hicieron que Murong Qi Qi se riera de ellos. Sin embargo, ahora Su Mei no tenía el tiempo para prestarle atención a Wanyan Kang. Desde su punto de vista, las actuaciones de Wanyan Kang fueron ocasionalmente demasiado infantiles. Ahora su atención estaba totalmente en Li Yun Qing, que era opuesto a ella.
Antes de venir, Murong Qi Qi permitió que la gente de la secta Moyu trajera toda la información sobre los 4 competidores de Xi Qi. Li Yun Qing era un maestro de 7º nivel, color púrpura. Su arma era una flauta de jade. Aunque este hombre se veía elegante como una deidad y normalmente parecía indiferente a todo con una expresión calmada, era después de todo el hijo mayor de la familia Li y alguien no fácilmente de tratar.
Sin embargo, aunque Li Yun Qing era poderoso, Su Mei tampoco era alguien con quien jugar. Ella había sido abandonada por sus padres en el mismo momento en que había nacido. Más tarde, Mozun la llevo a la secta Moyu donde aprendió cosas entre esas artes marciales capaz de matar gente. Entonces, frente a Li Yun Qin, Su Mei no tenía miedo.
"¡Por favor!"
Li Yun Qing sonrió, sacó su flauta de jade y le pidió a Su Mei que mostrara su arma.
Aunque Su Mei no le tenía miedo a Li Yun Qing, era muy cuidadosa. Esta era la competencia de apertura. Ella debía librar una hermosa batalla para alentar a las personas que seguían. Después de decidirse, Su Mei sacó su arma, una daga en forma de media luna.
"¡Joven maestro Li, por favor!"
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