A Mistaken Marriage Match 1 - Capitulo 7

Capítulo 7: Lou Xi Yan - Parte 2

Traducción Eng-Esp: Asani *tostosJuanMaríatostos*
Edición: Mermelada
Corrección: Crys


Bajo el gran árbol de baniano* en la entrada de la aldea, 2 hombres de constitución fuerte y musculosa estaban enfrente de cientos de aldeanos, uno tenía una piel oscura, casi mezclándose con la luz de la luna, toda su cara cubierta de un gélido hielo como si estuviera tallada en un glaciar; El otro tiene una piel blanca como la nieve, con un par de ojos azules como el mar profundo, capaces de embelesar con su magia a la gente. Sin embargo, sus miradas eran igual de amenazadoras y sus imponentes posturas atemorizantes. Bajo la débil luz de la noche, estas personas, una negra y otra blanca, los 2 de pie hombro con hombro, inexplicablemente aterrorizaban un tanto a las personas.
(E: árbol de grandes dimensiones que se caracteriza por desarrollar raíces aéreas desde sus ramas, dando la apariencia de tener muchos troncos.)

Sus cuerpos se apoyaban a cada lado del árbol de baniano. Mientras que un hombre espléndidamente vestido, quién parecía aburrido, se apoyaba en el otro lado; su semblante apuesto y brillante, sus movimientos casuales y despreocupados, de alguna manera una sorprendente figura elegante.

La mirada errante de Zhuo Qing se movió y se colocó en el otro hombre que estaba de pie detrás, cuyo largo cuerpo estaba apoyado en el árbol, ¡Sorpresivamente él se desplazó sin abrir los ojos!

Bajo la luz de la luna, el hombre estaba vestido con un largo traje color morado ciruela, cuya falda estaba bordada con varios jirones de simples y ondulantes líneas oscuras hechas de hilos de oro, su cabello estaba recogido con una sencilla hebilla de jade, sin usar corona, no obstante, eso no disminuía su noble y elegante estilo. Sus largos y estrechos ojos revoloteaban ligeramente, a juego con una simpática sonrisa en las comisuras de sus labios, todos sus gestos fueron gráciles, en efecto era un caballero como el jade. De su apariencia se podía decir que calentaba el corazón y deleitaba a la vista. Sin embargo Zhuo Qing se sentía un poco intrigada, especialmente por sus ojos, profundos y tranquilos, parecían ver a través de todo, pero en ellos habían un débil rastro de. . .

¿Un rastro de qué? Zhuo Qing entrecerró ligeramente los ojos mientras intentaba pensar, quería mirar un poco más claramente, de repente los ojos del hombre se ensancharon y él se giró mirando en su dirección. Alarmada, Zhuo Qing apresuradamente inclinó la cabeza, bajó el sombrero deshilachado, y ocultando la mayor parte de su rostro, finalmente lanzó un suspiro de alivio, ¡Un hombre con sentidos agudos!

Lou Xi Yan casualmente pareció recorrer con la mirada a la multitud, pero no encontró nada anormal, justo hace un momento tenía la extraña sensación de ser escudriñado, ¿Fue sólo su imaginación, o la persona se había ocultado demasiado bien? Si era así, su visita aquí no sería en vano.

El humor de Lou Xi Yan era bastante alegre, levantó la cabeza con una cálida sonrisa, dio un paso hacia adelante girando hacia el lado opuesto, pero solo este simple movimiento causo que los aldeanos se quedaran mirándolo con temor.

Cuando Lou Xi Yan caminó tranquilamente hacia ellos, sólo entonces los aldeanos lograron reaccionar, para rápidamente arrodillarse y gritar: "¡Nos reunimos con el Primer Ministro Da Ren*!" Zhuo Qing no solía arrodillarse, pero no tuvo elección, se obligó a imitar el gesto, medio agachando su cuerpo también.
[T: Da Ren - un título de respeto hacia los superiores]

"Todo el mundo levántense." Lou Xi Yan alzó ligeramente la mano, se rio y preguntó: "Ustedes me invitaron a venir aquí, ¿Qué ocurre?"

¿Invitado? Zhuo Qing suavemente arqueó su ceja, ¿Esto todavía podía ser considerado como una invitación?, ¡Este impresionante hombre tiene buen estilo ah! Su voz melodiosa, tranquila y elegante, ligeramente amortiguada, sonaba muy apropiada para este hombre. Tirando del sombrero, Zhuo Qing no pudo evitar mirar de nuevo, mirando al hombre de enfrente, cuya risa recordaba a una brisa primaveral.

El Primer Ministro, de acuerdo a rumores, era de hecho gentil y culto, quién amaba a la gente común como a sus propios hijos, ¡ah! Los aldeanos estaban muy alentados, al unísono, exclamaron: "Primer Ministro Da Ren, le rogamos que remedie nuestra queja ah!"

El grito por la corrección se repitió continuamente. Qi Tian Yu, incapaz de soportarlo, tapó sus oídos y dijo fríamente: "Si quieren apelar por justicia, deben ir a las autoridades correctas, secuestran a una persona primero, amenazan a un funcionario de la corte después, ¿Quieren ir a la cárcel?" Inicialmente pensó que disfrutaría de un buen espectáculo aquí, si hubiera sabido antes que iba a ser tan aburrido, no habría venido.

La voz de Qi Tian Yu apenas se habia desvanecido, cuando Wu Si ya se había levantado apresuradamente, Zhuo Qing quiso impedirlo, pero lamentablemente él se movió muy rápido, incluso Zhuo Qing fue incapaz de agarrar las mangas de su ropa.

Wu Si, inclinándose humildemente delante de Lou Xi Yan, golpeó resueltamente su cabeza 3 veces contra el suelo, respiró hondo y exclamó: “Primer Ministro Da Ren, nosotros, los campesinos, somos tan ingenuos, hemos llegado tan lejos, fue nuestro último recurso, hemos estado en la oficina del gobierno innumerables veces ya, los funcionarios dijeron que el caso ya ha sido sentenciado y nos echaron. Sin embargo, nos contuvimos. Tratamos de encontrar el remedio para nuestra queja por medio de Da Ren para apelar por justicia, pero Da Ren tampoco estaba en la capital. Queríamos buscarlo para razonar, pero ¿Pueden las personas comunes entrar en el Estado del Primer Ministro como quieran? Nosotros realmente estamos…” Wu Si ya no sabía qué decir, sólo podía continuar con amargura reverenciando vigorosamente.

Dong, dong, Zhuo Qing escuchó el ruido sordo aprensivamente ¡Él piensa que su cabeza está hecha de hierro! Zhuo Qing de repente golpeó a Xiao Wu Si que estaba a su lado, para luego susurrarle: "¡Exige justicia!"

“¿Qué?” Preguntó un confuso Xiao Wu Si.

¡Idiota! Pellizcando firmemente su brazo, Zhuo Qing siseó la palabra entre de sus dientes ‘Grita- injusticia-‘

Xiao Wu Si finalmente recuperó su ingenio, gritando: "¡Injusticia ah~~~!" La mano de ella era muy fuerte, ¡De verdad, como dolía!

El llanto masculino lleno de tristeza, también empujó a la multitud de aldeanos estúpidos a entrar en acción, inmediatamente después siguieron su ejemplo, gritando igualmente injusticia uno tras otro.

"Primer Ministro Da Ren, la injusticia ah…"

"El primer ministro Da Ren, concédanos el remedio…"

Retrocediendo, los ojos de Lou Xi Yan recorrían los rostros sinceros e indignados, parecían que estas personas realmente habían sufrido una injusticia a la cual querían apelar, entonces él dio un paso adelante, sostuvo a Wu Si que reverenciaba sin cesar todo el tiempo y dijo: "Usted podría también decirme directamente las circunstancias que rodean este error de justicia."

Wu Si se levantó frenéticamente, sin atreverse a permitir que Lou Xi Yan le prestara su brazo para sostenerlo, él tanteó su cuerpo por un momento, cuidadosamente sacó un pedazo de papel de su pecho, y muy cautelosamente le dijo: "Esta es la apelación."

¡También escribieron una apelación! Lou Xi Yan la recibió con una sonrisa, lentamente desplegó el papel.

Un momento después, con la misma sonrisa, preguntó casualmente: “Esta apelación, ¿Quién la escribió?”

Qi Tian Yu se aproximó, curioso, se apoderó de la apelación. Otras personas pueden no estar al corriente, pero él y Lou Xi Yan crecieron juntos, entre más casual es su tono, entre más amable es su sonrisa, entre más se interesa por una explicación, ¡Más sospechoso es!

¡Oh no, yo la hice! Zhuo Qing maldijo en voz baja. ¡Por todos los medios no se den la vuelta, no me miren, no miren hacia atrás! Zhuo Qing murmuró las palabras en su mente incontables veces, pero desafortunadamente los cielos no escucharon sus oraciones, y los aldeanos se dieron juntos la vuelta, sin excepción, todos mirándola.

¡Maldición! ¡Qué grupo de idiotas, idiotas sin cerebro! @ #% & *, ~ ~ ~
(C: estoy de acuerdo contigo X3 así te pagan diciendo que fuiste tú)

Zhuo Qing recordó todas las malas palabras que aprendió en sus 20 años de vida y los maldijo una y otra vez, pero aun así tuvo que levantarse lentamente, porque esta ‘gentil’ línea de visión ya se había enfocado con fuerza en ella.