jueves, 13 de septiembre de 2018

The Demoness - Capítulo 8 Parte 4

Capítulo 8 Parte 4


Traducción ENG-ESP: Mermelada
Edición/corrección: Crys

Ji Chui Yu no pudo abstenerse de preguntar: “Si él no hace esto, ¿Cómo se supone que luche por la justicia en nombre de su hija?”

“Hay muchas formas de exterminar a alguien, las artes marciales no siempre representan capacidad, especialmente en estos momentos cuando el violador es el enemigo público. No era necesario que el hiciera una invitación a una batalla con tal alto perfil. Cuando se exagera un espectáculo, hace que se vea simplemente falso.”

Liu Feng se abstuvo de ponerse en una posición, agitando el abanico en su mano, mantuvo silencio.

“¿Es este su prejuicio contra el Maestro Shui?”

“Simplemente estoy diciendo los hechos tal como son.”

“El Maestro Shui es un hombre generoso y franco, después de todo él es considerado un gran líder.” Ji Chui Yu no pudo evitar salir en defensa del sujeto en cuestión.

“¿Y qué hay con eso?”

En vista a su pregunta, tocando su punto ligeramente, Ji Chui Yu de repente no supo que decir.

Liu Feng hizo una interrupción oportuna diciendo: “¿Ustedes 2 han soportado un rencor contra el otro en sus vidas pasadas? Siempre peleándose el uno contra el otro de esta manera.”

Ji Chui Yu se rió a carcajadas y parpadeando juguetonamente dijo: “Entre nosotros 2, se puede decir que los enemigos están destinados a conocerse. ¿Pequeño Feng, estás celoso?”

Liu Feng se estiró y jaló a la persona que está a su lado hacia sus brazos, posicionándola sobre su regazo, y riendo dijo: “Si ustedes actúan de esta manera, es la única forma en la que puedo ponerme celoso.”

Desde el principio hasta ahora, la bola de carne cocida* sostenida entre los palillos de Qu Qing Yin no se sacudió ni un poco, ella se giró para mirar a Ji Chui Yu y entonces con calma y tranquilidad metió la bola de carne cocida en su boca.
(E: El platillo es shīzitóu o Lion’s head, literalmente significa cabeza de león.)

Ji Chui Yu se le quedó mirando fijamente por un momento, entonces de repente llenó hasta arriba su copa de vino y levantando su dedo pulgar hacia ella, le dijo: “Dama Qu, realmente se lo regalo.” La expresión y acciones de ella realmente no cambiaron ni un poco.

Al siguiente momento, la mano izquierda de Qu Qing Yin se quitó el broche para el cabello de su cabeza, en medio de un relámpago, ella apuñaló el muslo de cierta persona.

El abanico de Liu Feng se abrió, bloqueando el broche para el cabello, pero aun sonriendo amargamente dijo: “Estaba equivocado, ¿No es eso suficiente?”

Qu Qing Yin lo miró fijamente con frialdad.

Liu Feng tomó el broche que está en la mano de ella, volviéndolo a poner en su cabello. Con honestidad y sinceridad la regresó a su asiento original, se levantó y dijo con formalidad: “Lo siento.”

Ji Chui Yu le dio un vistazo al broche en su cabello, el cual había sido regalado por la Gran Señora Guan. Las comisuras de sus labios se contrajeron ligeramente, mientras que bajaba su cabeza concentrado en beber su vino.

Qu Qing Yin se sacó el broche para el cabello de nuevo y dijo fríamente: “Este broche, puede que me guste ahora, pero eso no significa que seguirá gustándome por el resto de mi vida, ¿Entiendes?”

El rostro de Liu Feng cambió ligeramente, apretando el agarre en su abanico dijo: “Qing Yin…”

Qu Qing Yin miró el broche en su mano, la mirada en sus ojos parecía bastante compleja.

Liu Feng tomó una vez más el broche de su mano y lo puso de vuelta en su cabello. Sosteniendo ligeramente su mano, suspiró audiblemente mientras decía: “No te enojes.”

Qu Qing Yin también suspiró, volteó su cuerpo y se medio-recostó sobre el alféizar de la ventana, mirando a los peatones en la calle.

Liu Feng y Ji Chui Yu se miraron el uno al otro y luego continuaron bebiendo y comiendo como les placía, dejándola prudentemente tranquila.

Porque ambos se dieron cuenta que ahora mismo Qu Qing Yin estaba de muy, muy mal humor. Sólo una pequeña provocación encendería un fuego monstruoso.

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La luz de la luna pavimentaba el suelo, como si toda la tierra estuviera cubierta de nieve.

La luna nueva se tendía en el cielo como un garfio, la belleza en frente de la ventana parecía una pintura.

Una capa calló sobre sus hombros, a la vez que un par de grandes manos descansaron sobre ellos, atrayéndola hacia sus brazos, suspirando de nuevo al decir: “Tu humor no parece correcto hoy.”

“No quiero hablar sobre eso.”

Liu Feng agitó su cabeza: “Si no deseas decirlo, no preguntaré más. Si quieres hablar sobre ello, entonces seré todo oídos.”

Qu Qing Yin miró hacia arriba, hacia la luna nueva, extendiendo sus manos dijo: “La luna de hoy es verdaderamente hermosa.” Si el corazón de las personas fuera así de brillante y claro como la luz de luna, que maravilloso sería eso.

“Sin importar cuan hermosa este la luna, no puedes dejar de dormir. Ya es tarde, duerme un poco. Mañana todavía tenemos que viajar.”

“Adelántate y ve a dormir primero, quiero quedarme un poco más.”

Él suspiró y le dijo: “Si tú no duermes, ¿Realmente crees que yo podré?”

Ella se mantuvo en silencio por un momento: “¿Son las noticias de Ji Chui Yu confiables?”

“Cuando se trata de reunir información, él de hecho tiene una habilidad para eso. ¿Tienes algo que preguntarle?”


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